21/12/13

Como distinguir entre la verdad y la imaginación.



Más de una vez me he preguntado “¿Qué es lo que implica ser dragón?” “¿Qué significa?” y especialmente… “¿Cómo sería la mente de un dragón?”
Es difícil (por no decir imposible) responder esas preguntas sin tener recuerdos de mis vidas pasadas. Pero así y todo uno puede llegar a obtener ciertos flashes de información.

Hasta ahora siempre me venía preguntando si lo que sentía era mi imaginación o era realmente información y creo que puedo discernirlo por como lo siento. Podría decirse que cada cosa tiene como una especie de MD5 (Es un método de algoritmo de reducción criptográfica para decir si un archivo ha sido alterado o si lo hemos recibido de manera intacta) que lo pongo para simplificar la explicación.
Si prestamos atención sabemos cuando nuestra mente rellena huecos (imaginación) o si realmente estamos viendo o sintiendo algo, especialmente cuando sentimos que algo es “correcto”

Otras teorías dicen que cuando imaginamos algo en realidad estamos viendo en una realidad paralela eso que realmente sucede. Teniendo en cuenta que en teoría hay infinitas realidades paralelas con infinitas posibilidades entonces todo es posible (por ejemplo que en alguna de esas realidades el perro imaginario de Rafa Gorgory que volaba moviendo la cola realmente exista). He leído también otra teoría que en realidad no recordamos nada, cuando recordamos algo en realidad estamos viendo en otra realidad que eso está ocurriendo en ese momento.

Un planteamiento que hago, evoquen un recuerdo cualquiera, haber hablado con alguien o haber visto un evento. Sentimos que es lo que sucedió por lo tanto es lo correcto. Entonces si volvemos a recordar ese evento y metemos un dinosaurio paseando por ahí sabremos entonces que el recuerdo no lo es tal porque su “MD5” (el sentimiento que indica que es el recuerdo correcto o fue modificado) nos indica que no fue así. Ese sentimiento es más importante que el hecho de decir “Es que el dinosaurio lo metí con mi imaginación” Porque de no ser así todos nuestros recuerdos podrían ser puestos en duda por detalles que nuestra mente rellene automáticamente. Ese sentimiento está ahí para asegurarse que nuestros recuerdos están intactos aunque no recordemos ciertos detalles. Por ejemplo los discos rígidos tienen controles para detectar errores de datos. Imagínense lo que pasaría si no existiesen esos controles; con el tiempo los datos se corromperían. En un documento algunas letras se cambiarían por otras. Una D podría volverse una B desaparecerían comas (ya se pueden imaginar palabras o frases enteras que cambiarían el sentido con la presencia o ausencia de una coma o una letra). Unos pocos errores harían que los programas dejen de funcionar (aunque solo se hayan modificado 10 bytes y los otros mil millones estén intactos). Traduciendo esto a nuestra mente sería que hayan varios recuerdos que no nos fiemos de ellos porque un día recordaríamos una cosa y al otro día habría algo distinto. Pero no… No ponemos en duda nuestros recuerdos (a menos que haya pasado algo traumático).

Con respecto a sentir cosas (visiones, sentimientos, etc) se puede aplicar el mismo concepto aunque sería más complicado. El MD5 siempre está ahí y nos puede indicar si lo que sentimos es real o es producto de nuestra imaginación o deseos. Si ahora mismo me pongo a pensar que fui un emperador Chino no siento ninguna sensación. Ese “recuerdo” no resuena en mi, ya que nunca lo he sido.
En cambio, si pienso en una vida como dragón entonces si siento una sensación de que eso es “correcto”, es una sensación muy parecida a cuando recuerdo algún día de mis vacaciones o de la escuela.

Lo importante es ejercitar ese sentimiento, ejercitar lo que resuena en nosotros. Creo que con suficiente ejercitación se podría obtener mucha información y con el tiempo de mejor calidad. Además estaremos ejercitando el ser asertivos y seguros en nosotros mismos. Si estamos todo el tiempo pensando en si algo es nuestra imaginación o no entonces siempre viviremos en la duda, y la duda nunca nos lleva a ningún sitio.